Antonio Rodríguez Fernández, gerente del Colegio de Graduados en Ingeniería Ramas Industriales e Ingenieros Técnicos Industriales de Navarra (CITI Navarra) y de la Asociación navarra de Empresas de Ingeniería, Oficinas Técnicas y Servicios Tecnológicos (ANAIT) analiza en este artículo de opinión la oportunidad que se presenta para los profesionales y las empresas navarras ante los fondos europeos ‘Next Generation EU’ .

 

Llevamos semanas, meses escuchando, día sí día también, mensajes en torno a los fondos europeos. No es para menos. La buena distribución y ejecución de las denominadas como ayudas ‘Next Generation EU’ es sin duda uno de los retos económicos más importantes que tenemos por delante. La crisis que nos deja la pandemia de la COVID-19 supondrá una oportunidad para impulsar sectores que urgían una modernización de estructuras, vital para el devenir de las próximas generaciones.

Sin embargo, todos somos conscientes de que los requisitos para acceder a estas ayudas serán estrictos y muy complejos. Analizados los proyectos presentados por Gobierno de Navarra, desde CITI Navarra y ANAIT consideramos que nuestro colectivo de empresas y profesionales técnicos van a ser claves para la ejecución- con garantías- de las líneas que se establezcan en sectores como la obra pública y privada, instalaciones, energía, sostenibilidad, digitalización y nuevas tecnologías, gracias a su experiencia, conocimiento y capacidad de desarrollo.

Navarra cuenta con un amplio tejido de profesionales altamente cualificado para asumir los retos que lleguen. Ésta ha sido siempre, y lo es también ahora, una de nuestras bazas, uno de nuestros puntos fuertes. Pero en este partido también habrá que poner en juego nuestra capacidad para colaborar, para agrupar a estos profesionales y a nuestras empresas; su gran mayoría pymes y micropymes que sostienen la Comunidad y para sacar provecho de unas ayudas que impulsen nuestros sectores estratégicos y aceleren las inversiones.

Es necesario que esta inyección de dinero llegue también, directa o indirectamente, a los autónomos y a la pequeña empresa de nuestra Comunidad. La predisposición de éstas a la cooperación con otras entidades del mismo, o distinto sector, ayudará sin duda a acceder a la financiación, sin olvidar que esta colaboración debe implementarse también entre los sectores público y privado.

Lograr esta unión nos situará en una posición muy ventajosa con respecto a otras comunidades y regiones europeas. Y en este punto, asociaciones como ANAIT, que agrupa actualmente a cerca de 150 pymes navarras de los sectores de ingeniería y tecnología entre las que surgen alrededor de 50 proyectos colaborativos cada año, estará siempre a disposición del tejido industrial navarro para asesorar, ayudar y trabajar por el mantenimiento e impulso de las empresas de nuestra Comunidad.

Navarra cuenta con una red de entidades y asociaciones que trabajan desde hace años unidas en muchos proyectos. Todos sabemos que la colaboración es algo complejo, pero también que el esfuerzo merece la pena. A nosotros la experiencia así nos lo ha demostrado. Nuestras entidades han fomentado siempre la cooperación entre sus socios y también la propia con otras organizaciones, públicas y privadas. Y gracias a ello se han puesto en marcha proyectos de éxito.

El último ha sido la inauguración del Hub de Ingeniería y Tecnología de Navarra, un espacio donde profesionales multidisciplinares y empresas se unen para colaborar, apostando por la innovación y la tecnología. Un laboratorio de innovación que nace con vocación de crecer, tanto en espacio como en entidades colaboradoras, y que está a disposición de la sociedad navarra.

Estamos convencidos de que uniendo esfuerzos, talento, ideas y proyectos ganamos todos. Y entre todos tenemos que ser capaces de no perder la oportunidad que ahora se nos presenta. La colaboración es más que una palabra bonita y debe llegar a materializarse de una forma real y efectiva. La recuperación sostenible y duradera de la economía de Navarra está en juego y no debe dejar a ningún profesional atrás.